Una fuerza de paracaidistas ha sido desplegada a lo largo de la frontera con México
elSalvador.com
Miércoles, 6 de Junio de 2012
De forma un tanto sigilosa, el Gobierno de Guatemala ha movilizado a otra de las unidades elite con que cuenta la Fuerza Armada de ese país, la brigada de paracaidistas, en una afanado intento de blindar su frontera con México, según reveló las semana pasada la revista Defensa.com, especializada en temas de seguridad mundial, aunque no cita la fuente de su información.
De acuerdo a la publicación, la movilización militar ha sido más en silencio en comparación con el desplazamiento de los Kaibiles a la frontera con México que cobró mucha notoriedad.
La Brigada de Paracaidistas, compuesta actualmente por el Primer y Segundo Batallón de Fusileros Paracaidistas, ha sido desplegada mayormente en el departamento El Petén, un territorio casi dos veces el tamaño de El Salvador.
El titular de seguridad, Mauricio López Bonilla, indicó que en El Petén se realizan operativos con los seis helicópteros Huey-II donados por cooperación interinstitucional antinarcótica y terrorista por los EE.UU.
Es en esa zona fronteriza donde, según la publicación de Defensa.com, se ha detectado la presencia de patrullas de paracaidistas chapines.
En su reciente visita a El Salvador, cuando se reunió con los ministros de Justicia de El Salvador y Honduras, López Bonilla indicó a El Diario de Hoy que las fronteras de Chiapas y Tabasco con Guatemala se han constituido en grandes flujos de narcotráfico, de migración ilegal, trata de personas y de contrabando.
El funcionario guatemalteco indicó que el fenómeno más significativo que se ha dado en los últimos años es la migración y la ampliación de la influencia de los Zetas.
Los Zetas es un cártel de narcotraficantes de droga mexicano que es calificado como uno de los más violentos dada la saña con que matan a sus víctimas, y que en los últimos años es notable el avance que sus fuerzas han tenido a territorios de Guatemala y Honduras, donde ya han perpetrado horrendos hechos de sangre.
Y es en ese punto por el cual las autoridades guatemaltecas han decidido blindar sus fronteras fuerzas elites del Ejército.
"El grupo es característico, porque no solo se dedica a apropiarse de rutas, sino también de la estructura e infraestructura criminal organizada que se encuentra en el área", explicó López Bonilla.
El funcionario guatemalteco definió la forma de operar de Los Zetas: Si hay extorsionistas, llegan y los captan, y los ponen a su servicio, si no es por las buenas es por la fuerza. También ponen a su servicio a las bandas de sicarios y de roba carros, aseguró el ministro de Gobernación guatemalteco.
López Bonilla también describió cuál era la situación delincuencial en Guatemala antes de que Los Zetas comenzaran a cooptar a la delincuencia de ese país como una forma de incursión en su territorio.
"En Guatemala lo que había eran grupos que tenían controles territoriales en el área de Izabal y Chiquimula, frontera con Honduras, una parte de Chiquimula y Jutiapa, frontera con El Salvador, buscando el área de las Verapaces, para México, y El Petén", explicó el ministro.
Según el funcionario guatemalteco, no son estructuras muy grandes, sino que están bien estructuradas lo que ellos llaman plazas. "Hay una estructura criminal bien instituida y eso fue lo que le dio un aumento exponencial de la criminalidad y la violencia en estas áreas".
Pero el problema parece haberse agravado en los últimos años, debido a que en los últimos meses las autoridades guatemaltecas han capturado a los principales cabecillas de los grupos que aseguraban los territorios para los flujos de droga sobre el lado de Guatemala y ellos le habían facilitado el control territorial a los mismos Zetas.
"Con la captura de Walter Overdick que era el principal narcotraficante en las Verapaces, junto con un lugarteniente se terminó un ciclo. Si antes habían unos seis grupos grandes y fuertes con la caída de estos capos ha habido una atomización", sostuvo Bonilla López.
De acuerdo con el ministro de Gobernación de Guatemala, cuidar la frontera terrestres en el caso de Honduras y Guatemala es muy importante porque viven una incidencia de la narco actividad muchísimo más fuerte que la que se tiene en El Salvador.
El fenómeno delincuencial que por ahora vive Guatemala se debe a la capacidad corruptora que tienen los narcotraficantes, además de sus mismos flujos de armamento y fortalecimiento del contrabando, del lavado de dinero, admitió Bonilla López.
Para este ministro, todos esos factores, aunados a la adquisición de grandes extensiones de tierras en Guatemala, vuelve muy complejo el fenómeno transnacional de crimen organizado en donde la narco actividad, tanto en el lado de Guatemala, Honduras y parte de Belice, forman parte de un corredor donde ha crecido en términos exponenciales del fenómeno de la criminalidad.
Al inicio de su gestión, el presidente Otto Pérez Molina se comprometió a movilizar más efectivos militares para hacer frente a los Zetas y a cualquier otro cártel mexicano que realice actividades delictivas en el país, así como más policías. —EDH
(Fuente)
elSalvador.com
Miércoles, 6 de Junio de 2012
De forma un tanto sigilosa, el Gobierno de Guatemala ha movilizado a otra de las unidades elite con que cuenta la Fuerza Armada de ese país, la brigada de paracaidistas, en una afanado intento de blindar su frontera con México, según reveló las semana pasada la revista Defensa.com, especializada en temas de seguridad mundial, aunque no cita la fuente de su información.
De acuerdo a la publicación, la movilización militar ha sido más en silencio en comparación con el desplazamiento de los Kaibiles a la frontera con México que cobró mucha notoriedad.
La Brigada de Paracaidistas, compuesta actualmente por el Primer y Segundo Batallón de Fusileros Paracaidistas, ha sido desplegada mayormente en el departamento El Petén, un territorio casi dos veces el tamaño de El Salvador.
El titular de seguridad, Mauricio López Bonilla, indicó que en El Petén se realizan operativos con los seis helicópteros Huey-II donados por cooperación interinstitucional antinarcótica y terrorista por los EE.UU.
Es en esa zona fronteriza donde, según la publicación de Defensa.com, se ha detectado la presencia de patrullas de paracaidistas chapines.
En su reciente visita a El Salvador, cuando se reunió con los ministros de Justicia de El Salvador y Honduras, López Bonilla indicó a El Diario de Hoy que las fronteras de Chiapas y Tabasco con Guatemala se han constituido en grandes flujos de narcotráfico, de migración ilegal, trata de personas y de contrabando.
El funcionario guatemalteco indicó que el fenómeno más significativo que se ha dado en los últimos años es la migración y la ampliación de la influencia de los Zetas.
Los Zetas es un cártel de narcotraficantes de droga mexicano que es calificado como uno de los más violentos dada la saña con que matan a sus víctimas, y que en los últimos años es notable el avance que sus fuerzas han tenido a territorios de Guatemala y Honduras, donde ya han perpetrado horrendos hechos de sangre.
Y es en ese punto por el cual las autoridades guatemaltecas han decidido blindar sus fronteras fuerzas elites del Ejército.
"El grupo es característico, porque no solo se dedica a apropiarse de rutas, sino también de la estructura e infraestructura criminal organizada que se encuentra en el área", explicó López Bonilla.
El funcionario guatemalteco definió la forma de operar de Los Zetas: Si hay extorsionistas, llegan y los captan, y los ponen a su servicio, si no es por las buenas es por la fuerza. También ponen a su servicio a las bandas de sicarios y de roba carros, aseguró el ministro de Gobernación guatemalteco.
López Bonilla también describió cuál era la situación delincuencial en Guatemala antes de que Los Zetas comenzaran a cooptar a la delincuencia de ese país como una forma de incursión en su territorio.
"En Guatemala lo que había eran grupos que tenían controles territoriales en el área de Izabal y Chiquimula, frontera con Honduras, una parte de Chiquimula y Jutiapa, frontera con El Salvador, buscando el área de las Verapaces, para México, y El Petén", explicó el ministro.
Según el funcionario guatemalteco, no son estructuras muy grandes, sino que están bien estructuradas lo que ellos llaman plazas. "Hay una estructura criminal bien instituida y eso fue lo que le dio un aumento exponencial de la criminalidad y la violencia en estas áreas".
Pero el problema parece haberse agravado en los últimos años, debido a que en los últimos meses las autoridades guatemaltecas han capturado a los principales cabecillas de los grupos que aseguraban los territorios para los flujos de droga sobre el lado de Guatemala y ellos le habían facilitado el control territorial a los mismos Zetas.
"Con la captura de Walter Overdick que era el principal narcotraficante en las Verapaces, junto con un lugarteniente se terminó un ciclo. Si antes habían unos seis grupos grandes y fuertes con la caída de estos capos ha habido una atomización", sostuvo Bonilla López.
De acuerdo con el ministro de Gobernación de Guatemala, cuidar la frontera terrestres en el caso de Honduras y Guatemala es muy importante porque viven una incidencia de la narco actividad muchísimo más fuerte que la que se tiene en El Salvador.
El fenómeno delincuencial que por ahora vive Guatemala se debe a la capacidad corruptora que tienen los narcotraficantes, además de sus mismos flujos de armamento y fortalecimiento del contrabando, del lavado de dinero, admitió Bonilla López.
Para este ministro, todos esos factores, aunados a la adquisición de grandes extensiones de tierras en Guatemala, vuelve muy complejo el fenómeno transnacional de crimen organizado en donde la narco actividad, tanto en el lado de Guatemala, Honduras y parte de Belice, forman parte de un corredor donde ha crecido en términos exponenciales del fenómeno de la criminalidad.
Al inicio de su gestión, el presidente Otto Pérez Molina se comprometió a movilizar más efectivos militares para hacer frente a los Zetas y a cualquier otro cártel mexicano que realice actividades delictivas en el país, así como más policías. —EDH
(Fuente)